El niño con trastorno de la conducta no respeta la autoridad, le importan muy poco los derechos básicos de los demás y rompe reglas sociales básicas, manifiesta conductas agresivas que amenazan con llegar a daño físico o a la propiedad, engaños, robos, ausentismo injustificado o ausencia del hogar. El niño con trastorno de la conducta es a menudo vengativo, irascible . Se cree que la causa de este trastorno es una combinación de factores del entorno y vulnerabilidad genética. El tratamiento puede incluir terapia conductual con el niño y los padres, y farmacoterapia.